Capítulo 8

Es el día de reyes y Leyre está entusiasmada, le encanta dar y recibir regalos. Hace un par de días quedó con Nayara y fueron a hacer las últimas compras. Para sus padres Leyre les va a regalar un viaje de fin de semana a una casa rural en el campo, a su querido hermano le compró una nueva equipación para el fútbol, ya que la antigua la tiene echa polvo. Nayara en cambio, no compró mucho. En su casa no son muy partidarios de los regalos, y en ese sentido envidia a su amiga, y la verdad es que tenía otras cosas en las que preocuparse.

Estaban en casa de Leyre preparándose para bajar a ver la cabalgata.
- ¿Te hiciste ya la prueba? - pregunta Leyre.
- No, no he tenido valor. ¿Y si da positivo? ¿Qué hago? - se le saltan las lágrimas. -  Ojalá el destino sea bueno y me traiga un buen regalo esta noche...

En otro lado de la cuidad, Efrén y sus amigos estaban celebrando, a su manera, el día de los reyes.
- Eh tio, nos vas a contar de una vez lo que te pasó con esa chica o que. - Pregunta Carlos, uno de sus amigos.
- A ver tios, que no paso nada, enserio. Nos dimos un par de besos y ya. - A Efrén no le gustaba mucho hablar de sus ligues.
- Venga, ¿enserio no te la tiraste? -  vocean a coro todos los del grupo.
- ¿Queréis dejarme en paz? Ahí os dejo, me voy a ver la cabalgata.
- Ah claro, has quedado con esa chiquilla y no nos lo quieres decir, ¿eh?...
Efrén se aleja pensando en lo que hablan sus amigos. No ha quedado con ella, pero le encantaría verla. Cada mañana que se levanta, su único pensamiento es ella. Lo que siente por ella le aterra, pero a la vez le encanta. Porque gracias a ello está conociendo a una chica maravillosa, la cual no conocía ni una igual.
Llegando a la cabalgata ve que aún no a empezado, por lo que se sienta en un banco a esperar.

Leyre y Nayara han quedado con algunas chicas de clase para ir a ver la cabalgata, recoger caramelos, y esas cosas que se suelen hacer cuando eres pequeño.
- Oye, ¿ese que está ahí sentado no es Efrén?
- Si, creo que si es. Voy a saludarle.
Se acerca a él, no sabe como saludarle.
- Hola. - dice con una sonrisa de oreja a oreja y un poco sonrojada.
- Hola Leyre, ¿qué haces por aquí? Si tu no sueles bajar por esta zona...
- Ya pero es que he quedado con unas de clase para ver la cabalgata y han dicho que aquí se ve muy bien... - en realidad la idea de bajar ahí fue de ella, por si le veía.
- Ah... - no sabe que contestar -  ¿quieres que la veamos juntos?
- ¿Y si pasamos de la cabalgata? - Dice con una sonrisa de oreja a oreja. De repente el chico la coge del brazo y se la lleva. Van los dos, solos, cogidos de la mano paseando por la calle, cuando llegan a un parque.
- Aquí solía jugar con mi padre cuando era pequeño... - intenta contener las lágrimas cada vez que habla de su padre, aún se acuerda mucho de él.
- ¿Qué le pasó? - pregunta Leyre, al ver la cara triste de Efrén.
- Murió de cáncer hace un par de años...
- Oh... lo siento. - No sabe que decir. - ¿Qué tal está tu madre?
- A ella le importa una mierda... Está con otro... - le molesta mucho que su madre se haya olvidado se su marido de una forma tan rápida. De repente se olvida de todo, nota unos labios sobre los suyos. Son los de Leyre. Le da un cálido beso que le hace olvidar todo lo malo y pensar solo en ella. En cuanto la quiere. Cuando terminan de besarse, se quedan mirandose el uno al otro. Él la corresponde con un caluroso abrazo, ya que ve que ella está tiritando.
- ¿Sabes una cosa? - Efrén no sabe como explicarse. - Desde este verano que estuvimos juntos... No se, siento que...
- ¿Qué? - ella sabe lo que él quiere decir, pero quiere que se lo diga.
- Te quiero. - Y la besa, fuerte. Como nunca ha besado a una chica. Y se quedan ahí juntos sentados mientras oyen la música de la cabalgata.

En el día de reyes, Leyre es la chica más feliz del mundo. No sabe que tiene exactamente con Efrén, pero sabe que algo hay. Ilusionada abre los regalos que le ha echo su familia. Le han regalado un Sony Vaio, que salió hace poco al mercado, y dinero y ropa. Cuando esta terminando de instalar todas sus cosas en el ordenador suena el teléfono.
- ¡Soy la mujer más feliz del mundo! - Grita alguien al otro lado de la línea
- Nayara, ¿eres tú? ¿Qué ha pasado?
- Esta noche tía, he recibido el mejor regalo de todos. ¡Me ha bajado la regla!
- ¡Enserio? Me alegro mucho tia. Y bueno a parte, ¿te regalaron algo tus padres? - sabe que los padres de Nayara no son muy partidarios de los regalos, pero siempre la compran algo.
- Me han dado 200€, por lo menos nos podremos ir de compras. - la oye contenta, y eso alegra aún más a Leyre - bueno, ¿y tú con el bomboncito qué tal?
- ¿Quedamos esta tarde y te cuento?
- Vale, a las 6 voy a buscarte.
- De acuerdo. Que te lo pases bien. - Y cuelga, poco después recibe otra llamada.
- Hola preciosa. - Oye su voz. Por teléfono le gusta aún más. - ¿Que haces hoy?
- Hola Efrén. Pues ya he quedado con Nayara, si termino pronto con ella quedamos, si quieres.
- Vale, cuando termines llámame. Yo estaré en casa de alguno de estos, asique tendré la moto a mano. ¿Quieres hacer algo en especial?
- Nose, ya veremos. - ¿Y encima tiene moto! Este chico cada vez es más perfecto. Poco después cuelga.

Efrén esta en su casa celebrando el día de reyes con su hermano, su madre y su nuevo novio. A Efrén le han regalado el nuevo Iphone, la verdad es que su antiguo movil estaba algo roto, pero le gustaba bastante, le iba a costar acomodarse al nuevo teléfono. Estaba deseando que Leyre le llamara para quedar. Eran las 6. Decidió coger la moto e ir a casa de Carlos, estaban ahí todos sus amigos. Carlos estaba siempre solo en casa, ya que su padre, que es con el que vive, ya que están divorciados, se pasa toda la vida viajando por trabajo. Todos le preguntan por lo que hizo ayer, pero solo contesta que estuvo dando una vuelta, solo. No sabe como decirles que se ha enamorado de aquella chica.

Esther.

PD: perdón por la tardanza.

Capitulo 7

Año nuevo

Abre los ojos poco a poco, no sabe donde esta, la cabeza le da vueltas, se incorpora en la cama y la ropa de nochevieja tirada por los suelos. Baja al salón y se encuentra con su madre.
-Hijo que quieres que te haga para comer.
¿Para comer?, ¿Que hora es?. Se pregunta el.
-No me apetece nada tengo el estomago cerrado mama.
-¿Que bebiste ayer mucho Efen?.
-Bueno un poco.-Me voy a mi habitación.
Llega a  su habitación y enciende el ordenador, ahí esta ella conectada, el decide hablarla pero ella se le adelanta.
-Buenas.¿Oye te acuerdas de que paso ayer?
-No mucho, recuerdo que nos fuimos juntos y estuvimos hablando y al final paso.
-Pero recuerdas algo mas, es que tengo imágenes borrosas en mi cabeza.
-No se creo que no paso nada mas, pero deberíamos quedar un día y hablar de lo que paso a noche y que tenemos que hacer al respecto.
-Me parece bien, cuando tengo tiempo quedamos. Bueno me voy que he quedado con Nayara.

Paso lo que tubo que pasar y no me arrepiento de nada y volveria a pasar ese instante  si es con ella.



En otro lugar de la Madrid.

-Hola, ¿donde te metiste a noche cuando te fuiste con Leo?, ya puedes contármelo todo.
-Hola, pues nos fuimos a dar una vuelta y al final acabamos en los baños del local, nos liamos, y no paso nada luego después me fui a la barra estuve bebiendo mas y conocí a un chico francés y no me acuerdo mucho iba muy borracha y me lié con el.-Dice Nayara entre sollozos.
-¡Cariño!. ¿Porque lloras?, que te paso te hizo daño.
-Pu....pues que no me acuerdo muy bien pero creo que tuvimos relaciones sexuales, me acuerdo que le decia que no me apetecia que me encontraba mal pe.. pero al final le dije que si.
-Bueno entonces todo bien no.
-Si-dice Nayara no muy convencida.

Pues tengo algo que contarte de ayer dice Leyre.
-Resulta que me quede sola en la barra y me llego Efren por detrás y me dijo de hablar, claro yo iba un poco tocada por el alcohol y acabe aceptando, estuvimos hablando y al final nos acabamos liando, y de lo demás tengo imágenes borrosas no me acuerdo de mucho mas, no se si pasaría algo mas o no.
-¿Y el se acuerda?
-Si se acuerda de casi todo. He estado hablando con el y me ha dicho de quedar un día y hablar de todo lo que paso en ese día y lo que sentimos los dos y como actuar.


En otro lugar de las calles de Madrid.


Un chico alto rubio, con ojos azules habla con su mejor amigo a miles de kilómetros de el.

-¿Que tal la nochevieja?
-Muy bien, estuvimos en un local de una chica y me acabe liando con una.
-Como se entere Catalina te mata.-Dice entre risas
-Estamos a kilómetros no creo que se entere ademas siempre tendré la escusa de que iba borracho. Y bueno la chica muy guapa y al final me la tire.
-Que dices tío-Dice riéndose-Estas echo todo un golfo.
-se hace lo que se puede, ¿y bueno tu que tal?
-Bien estuvimos un rato en casa de Angela y después fuimos al Bar de padre de Hector y no hay mucho mas que contar.¿oye cuando vuelves?
-Pues creo que dentro de unas tres semanas me tendrás ahi.


Día 4


En casa de Nayara.
-Tengo otra cosa que contarte.-Dice nerviosa
-Me estas asustando Nayara, ¿estas bien?.
-No-Rompe entre sollozos.-Creo que lo hicimos sin preservativo, todo esta muy borroso no me acuerdo ¿ y si me he quedado embarazada?, me tenia que haber bajado la regla hace dos dias y ami nunca se me retrasa.
-Bueno no te preocupes mañana iremos a la farmacia a por un test, pero tranquila que todo ira bien y me tienes aquí para lo que sea.
-Gracias.Bueno corre vete que ya llegas tarde a tu tan esperada cita.



Leyre sale corriendo de casa de Nayara y coje el metro, como siempre llegara tarde.
Por fin llega y ahí le ve tan guapo como siempre, se acercan y no saben como saludarse, los dos se quieren pero no saben nada de los sentimientos el uno del otro.
Pasara unos dias hasta que se demuestren sus sentimientos






Desi

Capitulo 6

Ya por fin era nochevieja. Llevaba esperando ese día semanas. Ella estaba alegre pero a la vez triste ya que la nochevieja indicaba que se estaban acabando las vacaciones de invierno.
-Vamos hija, que como todos los años llegamos tarde, y luego nos quedaremos en el peor sitio de la mesa.
Llegan al parking y se introducen en el lexus RX450h de color plateado, asiento de piel , a Leyre siempre le ha encantado ese coche. Es de primera gama.
Mientras van en el coche Leyre no para de repasar todo lo que lleva en el bolso por si acaso se le a olvidado algo, mira todo y se encuentra un osito de peluche pequeño que le regalaron los de clase por su cumpleaños.
-¡No me acordaba que estaba aquí!.-Mama ¿cuanto queda?, que ya me esta entrando hambre.
-Ya queda poco hija.-Dice la madre suspirando y metiendole prisa a su marido.
Cuando llegan se encuentran con la mesa ya puesta y el escenario decorado.El salón esta decorado con nieve artificial por encima de la mesa, velas doradas, rojas y blancas, los platos son blancos con el borde de color rojo, la casa huele al pino que tienen en una esquina, decorado con bolas de todos los colores. Leyre piensa que este año su tíos Consu y Jesús, (este año le tocaba celebrarlo en su casa ya que todos los años se rotan para que cada año toque en una casa)Siempre se lo curran muchísimo.
Todos los de la familia ya han llegado todos están espectaculares, los chicos con sus trajes casi todos parecidos y la chicas con vestidos de todos los colores y gustos.
-Hola chicos, casi llegáis para las campanadas.-Dice consu entre risitas.-Anda pasar y tomar asiento que dentro de poco cenaremos.
A Leyre cada vez le parece que la familia aumenta ya son unos veinticinco personas y dos que están en camino, piensa que dentro de unos años no cabrán en ninguna casa.
Se sientan y la cena empieza.
De entrante hay canapés de salmón, de caviar, etc, de primero hay langosta rellena y de segundo paletilla de cordero.
Cuando terminan de cenar todos se sientan en el enorme sofá de terciopelo blanco, y encienden la televisión.
Quedan solo 15 minutos para que sean las doce de la noche. Leyre esta atacada de los nervios, esta pensando en los deseos que pedirá este año (no sabe que alguno de ellos podrá cumplirse esa misma noche), en levantarse con el pie derecho y miles de cosas mas.
Empiezan los cuartos y después llegan las campanadas toda la familia empiezan a comer uvas excepto los mas pequeños que comen lacasitos ya que las uvas no les gustan.
En la octava campanada Leyre casi se atraganta como todos los años, suena por fin la doce campanada y todos se levantan empiezan a gritar, a darse besos , a beber champan, etc.
Leyre esta una hora mas en casa de sus tios y a la una va a buscarla Nayara con dos chicas mas y un chico.
-Bueno familia me voy  de fiesta pasarlo bien. Besos.-Dice mientras se termina de arreglar.
-¿A donde vas este año Leyre?-Dice su primo de tan solo 6 años.
-Pues me voy a un local con unos amigos de fiesta.


Por fin ve a su amiga Nayara con el vestido que se compro el otro día ,es de color rosa palo de tubo con un lacito en uno de los tirante, le llega por encima de la rodilla,  es precioso piensa Leyre, luego saluda a las otras dos chicas y al chico que también van muy guapos.
El chico las lleva en su Ford fiesta blanco como la nieve.
-¿ Y como que Marta tiene un local?-Pregunta una de las chicas.
-El local es de su padre, era un antiguo pub, nos han dicho que habrá dos camareros y un dj y que es bastante grande.-Dice el chico mientras llegan al local.
Ya dentro de pub las dos chicas y el chico se van a saludar a sus amigos y Leyre y Nayara van a saludar a Marta.
-Hola. Estos es enorme y esta muy bien.-dicen las dos a la vez asombradas.
-Hola.-Dice entre risas.-Bueno no esta mal lo he intentado adornar lo mejor posible. Tenéis barra libre a la derecha y los baños están  allí.-Señala hacia unas escaleras que suben a las segunda planta-Bueno si necesitáis algo ya sabéis, a y ¡feliz año nuevo!.
-Gracias.
Se dirigen la gran multitud y empiezan a saludar a todos. De repente  Leyre siente un escalofrio.
¿¡que hace el aquí!?-piensa atacada de los nervios.Bueno pasare de el.
Se dirigen hacia  la barra y empiezan a beber y bailar.Se les acerca un chico por la espalda y le da con el dedo a Nayara.
-Hola Leo. Feliz año nuevo.-Dice Nayara sonrojada. 
-Hola.
-Hola Nayara. Hola Leyre. ¿Oye te vienes a dar una vuelta y a hablar un rato?.
-Vale.-Dice Nayara mientras que le coje de la mano a Leo.-Luego te veo Leyre.-Le guiña un ojo y le saca la lengua.
Leyre empieza a beber un cubata tras otro y cuando va ya por el cuarto un chico se acerca y empiezan a hablar.
-Hola. ¿que tal?-Bice un poco ebrio
-Hola Efren, bueno un poco chispa ¿y tu?.
-También.¿Oye vamos a dar una vuelta y así hablamos?


Un día antes


-!Dios¡ Tía necesito tu ayuda por favor.-No se que tacones ponerme ni que peinado hacerme y solo queda un día.-Dice Leyre a Nayara.
-A ver no te preocupes de tacones te compraste hace dos semanas los blanco ¿no? pues ponte eso que con el vestido le queda muy bien y de peinado hazte algún tirabuzón y recogetelo con unas horquillas.
-Bueno luego me hace una prueba con el peinado la ropa y el maquillaje. y a todo esto ¿tu como vas a ir? que no se nada de tu vestuario.
-Ya lo veras.-Dice mientras se hace la interesante.
-Tu siempre dejando con la intriga. ¿y bueno sabes quien va a ir a la fiesta?
-Pues todos los de clase seguro. Va a ir Leo así que a ver si esta vez cae.
-¡Que chica!.-Bueno te cuelgo ya que mi padre tiene que llamar, mañana nos vemos.
Decide encender el ordenador. Y ahí esta el conectado, no sabe si hablarle para felicitarle o no, pero al final decide no hablarle y pasar de el sera lo mejor, piensa ella.


En otro lugar de Madrid.


Después de llegar de compras esta muy cansado, decide darse una ducha y después enciende el ordenador. La busca para ver si esta conectado pero ella no esta, para no aburrirse empieza a hablar con Jose de la fiesta de mañana.
-Tío no se si ir mañana a esa fiesta, van a ir todas las de 1º y de 2º van a ir muy pocas personas.
-Vente, yo iré sobre las una y media porque primero tengo que recoger a unas chicas a su casa..-Dice Jose.
-Bueno ya veré si veo que me aburro mucho voy.
De pronto ve que ella esta conectada , pero no sabe si hablarla o no .Bueno si quiere algo que me hable ella, que estoy cansado de hablar siempre yo piensa Efren.


El día de nochevieja.


Se dirigen hacia la segunda planta. Allí solo hay dos parejas.
-¿Y bueno de que quieres hablar?.-Dice Leyre.
-Pues de que tal las vacaciones, que has echo estos días.
-No gran cosa.-dice muy seca.
De repente se lanza uno sobre el otro y se besan.
Mirada de complicidad, compenetración, sentimiento inexplicables . Todo aquello es maravilloso piensan los dos.


En otra parte del local una de las personas no olvidara lo que le va a ocurrir en la semana siguiente.




Desi.
PD: Lo sentimos por la tardanza.

Capítulo 5

Había pasado ya bastante tiempo desde aquel encontronazo con Efren. Llevaba semanas sin hablar con él. No podía soportar lo que estaba empezando a sentir, y aunque dijo que se lo sacaría de la cabeza, no lo a conseguido. Cada día piensa en él, cuando se lo cruza por los pasillos siempre unas mariposas en el estómago, aquellas que dicen que sientes cuando estas enamorada.

Es día 21 de diciembre, día de las notas. Leyre está muy nerviosa, pues aunque escogió estudiar lo que quería, un par de asignaturas se la habían atragantado este trimestre. Al recibir las notas vio que no fueron tan malas, casi todo notables... Excepto ese 3 en matemáticas, tenía que recuperar como fuera, incluso podría buscar un profesor particular.
Las notas de Efren, en cambio, eran todo sobresalientes, menos un 7 en dibujo técnico, pero esa nota la subirá como sea, quiere estudiar en una buena universidad.

Esa misma tarde, Leyre llamó a Nayara y quedaron para ir a comprar unos vestidos, puesto que Nochevieja se acercaba y las habían invitado a una gran fiesta, a la que acudirían más de la mitad del instituto, asi que tienen que ir perfectas, puesto que no saben lo que podrá ocurrir esa misma noche.
- Tía, ¿tu crees que a mi el azul de este vestido me queda bien? - Pregunta Leyre a su amiga mientras sujeta un vestido azul celeste de palabra de honor, con escote de corazón.
- La verdad, es que el vestido me gusta, pero el color no me convence. ¿Por qué no te pruebas este? - Le contestas mientras sujeta un vestido exactamente igual pero en color coral.
- Tía, ese color no me gusta mucho... Pero bueno, si me queda bien me lo compro. - Dice mientras va al probador.
- Leyre, en serio, me encanta como te queda, ¡Cómpratelo!
- A mi también me gusta. Decidido, me lo quedo. ¿Qué tal quedará con mis zapatos negros? - Siguen hablando de vestidos, zapatos, peinados y complementos para la fiesta durante la tarde entera.

Efren llega a su casa de recoger las notas. Está un poco cabreado por ese 7, pero más aún porque lleva semanas sin hablar con ella. Se conecta, pero no, no está. Tengo que hablar con ella, piensa mientras empieza a hablar con sus amigos y a planear la fiesta a la que todo el mundo acudirá. Pero mientras tanto no deja de pensar en la tarde en la que la cagó. No sabe porqué la besó. Fue un impulso, no pudo remediarlo. No sabe lo que siente por esa chica, pero sabe que no lo ha sentido nunca por ninguna. Le sienta muy mal no poder verla, nada más que en los pasillos, siempre que la ve conectada y la habla, ella no contesta, a lo mejor no está, piensa él, pero en realidad es que ella no quiere hablar con él. Cuanto más le ignora, más le duele. No sabe que hacer. Decide coger la mochila e irse al gimnasio a desahogarse con su propio cuerpo.

De camino allí se encuentra con Nayara y Leyre llenas de bolsas. Efren quiere saludarla, pero no sabe si ella corresponderá ese saludo. Lo único que sabe es que su corazón empieza a acelerarse... Pero no sabe que a ella le pasa lo mismo.
Y ambos se cruzan, se mantienen las miradas, pero ninguno de los dos dice nada, y se dan cuenta de que cuando ven al otro, sienten algo que jamás habían experimentado.



Esther.

Capítulo 4.

''Leyre, tenemos que hablar. Te veo esta tarde en el parque de al lado de tu casa, si no vienes, lo entenderé. Un beso''
Estaba atónita con lo que estaba leyendo. No sabía si ir o no. Le había hecho mucho daño, pero él merecía explicarse. No entiende como puede ser tan buena. Son las 5 de la tarde, pero ella no sabe a que hora estará el en el parque. A lo mejor se tira allí toda la tarde, piensa no muy convencida. Decide llamar a Naiara:
- Tía que hago, ¿bajo o no bajo?
- No se tía, el chico tiene derecho a justificar sus actos, pero la verdad, que con todo lo que me has contado no se eh.. - Comenta Naiara muy convencida.- ¿Va a estar toda la tarde? ¡Oye, tú ves el parque desde el balcón, mira a ver si está!
- ¡Qué dices tía, como voy a hacer eso! - No sabe que hacer... Decide mirar y ahí le ve, sentado en un banco, escuchando musica con su iphone en la mano. Es tan guapo... - Tía, decidido, voy a bajar . ¿Qué me pongo?
- Vale, me parece bien que bajes, pero espérate un poco más, hazle esperar. Y de ropa nose, ibas bien hoy como ibas a clase.
- Vale, ¡te llamo luego!
- ¡Adios cabeza loca! Te veo mañana en clase.

Al final se viste igual que fue a clase hoy. No va muy convencida de los shorts con las converse, pero le gustan sus piernas. Se baja corriendo, no aguanta más tiempo sin verle. Coge las llaves y se va.
- Mamá, me voy a dar una vuelta con Naiara, luego vengo.
- Ve con cuidado hija.

Da un portazo y va corriendo a hablar con él. Le ve, sentado. Es mucho más guapo si le ves de cerca. Su piel brilla bajo los suaves reflejos del sol. Está justo detras de él, huele su colonia, no sabe si decirle algo.
- Veo que has bajado...
- ¿Cómo sabes que estoy aqui? - pregunta un poco sorprendida.
- Hueles a kilómetros. - a Efren le encanta la colonia que usa Leyre, es muy dulce, como una gominola. - Que por cierto, no se si lo sabes, pero me encanta la colonia que usas.
- Em... Gracias, creo. - No sabe que contestar. - Bueno, ¿qué querías? - Quiere ir directa al grano.
- Verás... - No sabe como empezar. - Quería decirte que el otro día no te salude, porque no te vi, no porque no quisiera. - No está muy convencido de sus palabras. Levanta la vista y ve los preciosos ojos azulados de la chica mirándole.
- A, osea que no me dices que no me saludas porque no quieres, si no, ¿porque no me ves? - está un poco cabreada, aunque los ojos verdes del chico la dejan sin aliento, ella no deja de decir lo que piensa. - No se, yo cuando pasa la gente me fijo a ver quien es, y más si me saludan. Pero claro, estabas con tus amiguitos y tenias que hacerte el chulito, ¿no? Es eso, está claro.
- No saques las cosas de quicio. Yo saludo a quien quiera cuando quiera. No soy victima de los pensamientos de mis amigos. Tengo personalidad propia, y saludo a quien yo quiero, ¿lo entiendes? - se está encendiendo por momentos. - Y si no te saludé fue porque no te vi.
- Claro, pero cuando pasé tampoco te giraste a ver si era yo.

No sabía que responder... Se la queda mirando a los ojos. Son preciosos... Y al final lo hace. Coge su cara con ambas manos y la besa. Leyre no puede soportarlo, no sabe como actuar. Se separa rápidamente.
- ¡Pero de que vas! Eres un mentiroso, me llamas para hablar y solo quieres liarte conmigo. No se como he aceptado a bajar. - Esta cabreada, pero a la vez le ha encantado ese beso. - Tendría que haberle hecho caso a Naiara y pasar de ti desde el principio. ¡Eres igual que todos!
Leyre se va corriendo a su casa, no aguanta más esa situación.
Efren se queda allí, en el banco, pensativo. Nunca una chica le había rechazado un beso. Ni de esa manera. Lo peor es que al besarla su corazón se aceleró, pensaba que se le salía del pecho.

En cuanto ella llega a casa, llama a su amiga y le cuenta todo.
- ¡Qué te besó? Lo sabía, ¡sabía que iba a lo que iba!
- Y tú encima no me digas eso... - Leyre llorando, no sabe que hacer. - Está decidido, a este chico le saco de mi cabeza pero ya, es como todos.

No se imagina lo que le costará hacerlo...


Esther.

Capitulo 3

Leyre iba tan despistada por la calle que si no llega a parar el coche que estaba pasando por la carretera a velocidad media casi la atropella , ella ni se da cuenta de lo sucedido ya que llevaba su ipod de última generación azul, ese que le compraron hace tres semanas por su diecisiete cumpleaños. Todo había pasado tan rápido desde que empezó el curso, ya habían pasado tres semanas pero para Leyre es como si hubiera pasado un año entero de curso.

Tras haber terminado de hablar con Efren decidió apagar el ordenador y ordenar la habitación ya que estaba muy desordenada y la ropa por todas partes.

-Vamos baja ya que se te queda fría la cena. Dice su madre a regañadientes a Leyre. -Que ya voy mama que estoy terminando de ordenar la habitación ahora bajo .Esta mujer siempre igual no entiende que tengo cosas que hacer piensa Leyre muy cabreada.

La cena trascurre muy lenta para Leyre ya que sus padres como siempre no paran de preguntarle tonterías tales como: y que ya tienes novio, pues si tienes novio ya sabes que nos lo puedes presentar, y que si hacéis algo hay que tener precauciones y todo ese tipo de preguntas que te hacen avergonzarte delante de tus padres.

Ella decide terminar deprisa para no tener que aguantar  mas a sus padres y una vez terminada la cena se va a la cama.

Decide acostarse pero no concilia el sueño, no para de pensar en todo lo sucedido con Efren, ella sabe que le quiere y mucho y que jamás estará a su altura.

Son las diez de la mañana y Leyre sigue durmiendo, ha pasado una noche muy movidita no se llego a dormir hasta las 7 de la mañana asique su madre decide no despertarla.

-¿Pero qué hora es? .¡Mama pero porque no me has despertado ! Que hoy tengo un examen muy importante.- Dice Leyre mientras se viste a toda velocidad y hace su mochila.

Sale de la habitación a toda velocidad y coge el metro, consigue llegar a clase a tiempo para hacer el examen.

-¿Qué te ha pasado? ¿A qué no sabes quién se ha pasado hoy por clase? - Le dice Naiara con una risita picarona.

-Que no he dormido nada y mi madre a decidido no despertarme ya que me veía muy cansada. - Dice ella. - Ya pensaba que no llegaba al examen.

Justo cuando iba a preguntarle que quien había estado en clase a Naiara entra el profesor de Filosofía y empieza a entregar los exámenes.

Mientras está haciendo el examen le suena el móvil a Leyre.

- Mierda se me ha olvidado apagarlo.-Piensa ella  muy colorada.
- Leyre trae de inmediato ese móvil. - Le dice el profesor con mal humor. - Te lo daré cuando acaben las clases y que no se vuelva a repetir.
- Si profe. Se me había olvidado apagarlo, lo siento.

Una vez terminado el examen y se lo entrega, y profesor se la queda mirando muy extrañamente pero ella no le da importancia.

-¿Quién te ha enviado el mensaje?-Le dice Naiara.

-No se no me ha dado tiempo a verlo, bueno siguiendo  con la conversación anterior, quien se a pasado por clase hoy?
-Pues...es alto, moreno, ojos azules, esta en segundo de bachillerato y todas se mueren por él. ¿Quien será?  - Dice Naiara con cara de pensativa.

-¡Que dices! ¿Y que hacía por aquí él? - Dice esta mientras que piensa en la conversación que tuvo con él la noche anterior.

No lo sé estaba como con cara de preocupación.

Llega la hora del recreo y Leyre decide ir a buscar al profesor de filosofía ya que se iba a casa porque se encontraba mal y para que le diera el móvil.

De vuelta  su casa decide encender el móvil y ver quien le había enviado es mensaje. Mientras que lee el mensaje se queda sorprendida no da acredito a lo que está leyendo.

Desi

Capítulo 2.

Es el primer día de curso para Efren y todos sus amigos. Están todos en segundo de bachiller, algunos en ciencias, como Efren, y otros en sociales, como su mejor amigo Dani. Para Efren va a ser un año difícil, ya que quiere sacar buenas notas para poder ir a la universidad. Pero no sabe que este año va a ser totalmente distinto a como se espera que sea.
Pasa la mañana en clase, atendiendo como siempre. Porque aunque de una imagen de chico duro, es muy inteligente y estudiando lo más mínimo saca unas notas muy buenas. En la hora del recreo está charlando con Dani cuando oye a alguien que le saluda.
- Efren, ¿quien es esa que te ha saludado? - Pregunta Dani. - Se ha puesto triste cuando no la has contestado.
- Yo que se tío, será cualquier chica que vaya detrás de mi. - Responde Efren. - Si con lo bueno que estoy están todas loquitas por mi. será alguna friki.
Lo que él no se ha dado cuenta es que la chica que le saludó es la que le va a cambiar la vida.


Cuando llega a su casa después de un largo primer día de clase, se acuerda de que hoy comía solo en casa. Ya que su madre había quedado para comer con su nuevo novio, cosa que Efren no aceptaba, ya que su padre murió hace varios años de cáncer. Por no cocinar, decide pedir una pizza. Mientras espera a que esta llegue empieza a hacer zapping en la tele, y deja Padre de Familia, ya que no echaban nada mejor.
A los diez minutos llega la pizza y empieza a comer. Cuando quiere darse cuenta es la hora de ir a recoger a su hermano pequeño, David, al colegio. Así que coge su Ipod y sale.


- Tate, ¿como es que hoy mamá no ha venido a buscarme? - Pregunta David con curiosidad.
- Por que ha quedado con el hombre que viene a casa por las tardes. - No sabía Efren como explicarle a su hermano pequeño que su madre estaba con otro hombre.
Al llegar a casa, Efren le dice a su hermano que vaya a hacer deberes, y él decide conectarse al ordenador, para hablar con ella. La ve conectada.
- ¡Hola! ¿Qué tal? :) - Pregunta esperando obtener una respuesta.
- Hola. Estoy bien, ¿y tú?
- Yo bien. ¿Te pasa algo? ¿Qué tal el primer día? - Intenta sacarle conversación, ya que la ve un poco extraña
- No, no pasa nada. El día bien, hasta que he saludado a alguien y me ha mirado de forma extraña. 
- ¿Quién? - pregunta él extrañado. No sabe a dónde quiere llegar.
- Ahora no te hagas el sorprendido.  Qué has sido tú el que me ha ignorado... Oye, me tengo que ir, que tengo que hacer cosas. Hablamos esta noche.
- De acuerdo... Hablamos cuando quieras - De pronto se acuerda de la chica que le saludó en el recreo y él no contestó. ¡Era ella! Se siente fatal...
Para dejar de pensar un rato en lo mal que se sentía, Efren decide ir al gimnasio y entrenarse un poco, que hacía mucho que no se daba una buena paliza.
Una vez llegado allí, decide hacer unas pesas y fortalecer sus brazos. Y de repente empieza a recordar ese verano...




Se sentía un poco mal por haberse chocado con esa chica y no haberla dicho nada. Le suena de algo, no sabe de qué, así que decide girarse y hablar con ella.
- Perdona, no me has dicho como te llamabas. - Pregunta descaradamente, con una sonrisa perfecta.
- Y... ¿Por qué te interesa mi nombre? - Le responde un poco borde, pero a la vez sonrojada.
- Porque si quiero invitar a una chica a cenar alguna noche, primero tendré que saber su nombre. - No se cree ni él lo que ha dicho. Nunca había sido tan directo con una chica.
- Es que tal vez yo no quiera quedar con un chico a cenar alguna noche. - En realidad, esta deseando quedar con él, pero no se lo va a poner nada fácil.
- Bueno, pues cuando quieras quedar, me llamas. - Efren le entrega a Leyre un papelito con su número de teléfono, pensando que en cuanto se diera la vuelta la chica lo tiraría.
- Entonces, si cambio de opinión te llamo. Por cierto, me llamo Leyre. - Y se aleja con un contoneo de caderas al cual el chico no puede evitar mirar...
Esa misma noche recibe un mensaje de aquella chica. ¡No se lo esperaba! Le hace tanta ilusión como si a un niño le regalan un juguete nuevo...


Efren esta en el gimnasio ya cansado de hacer ejercicio. Ya es tarde, es mejor que vaya a casa, su madre estará preocupada. Por el camino no deja de recordar lo que ha hablando con Leyre esta tarde. Haber si hay suerte y se conecta esta noche y habla con ella, necesita pedirla perdón, pero no sabe como. Sus amigos no saben nada de lo que siente por ella. No sabe que podrían decirle. Cuando llega a casa se encuentra a su madre haciendo la cena.
- Mamá, ¿qué hay esta noche de cena? - No tiene hambre, pero si le gusta lo que hay, a lo mejor cena algo.
- He hecho un poco de sopa para tu hermano. ¿Tú quieres algo? - le pregunta su madre.
- No, no hace falta que hagas nada, no tengo hambre. - se va corriendo a darse una ducha.
Se ha despejado un poco, pero sigue dándole vueltas a todo lo referido a esa chica. Ni él sabe lo que está empezando a sentir por Leyre.


Esther.